Pasaron muchas cosas que no las tengo completamente escritas, las prácticas que hacía en la clínica ya no las hacía solo con Romina sino también con Priscilla, íbamos más de dos veces a la semana y nos la pasábamos bien, yo seguía enamorado de Pris, y mientras la tenía cerca lo que sentía se hacía más fuerte.
Si no me equivoco para ese entonces Pris ya había terminado su relación, estaba sola, y yo pues no sabía qué hacer, tenía muchas ganas de decirle que me gustaba y que me encantaba como era, quizás se lo mostraba, pero nunca se lo decía, éramos muy buenos amigos y lo que menos quería era perder esa amistad, ya que si eso pasaba me sentiría muy mal al no tenerla cerca y sintiendo ya no un simple cariño por ella.
Solíamos hablar mucho por teléfono, me contaba sus cosas, yo hacía lo propio, la relación que teníamos de amigos era muy linda, pero en muchas circunstancias no podía aguantar el decirle que la quería de una manera distinta.
Recuerdo que una tarde en Internet me atreví a decírselo, ella no sabía que decir, se quedó muda, hasta creo que lo tomó en broma, pensó que me estaba burlando de ella, pero luego me dijo que era mejor hablarlo personalmente; tenía toda la razón, mi timidez hizo que lo haga por el Messenger y eso no hablaba muy bien de mí.
Cuando estábamos en clases no sabía que decirle, mi timidez me impedía saber que palabras usar para hablarle, me sentía un tonto, solo la trataba como siempre, pero me sentía mal al decirle una cosa por Messenger y parecer que era mentira.
El sábado de esa semana salimos al cine con Romina, su ex, Liz, su enamorado, Priscilla y yo, decidieron ir al cine por decisión de Romina, las demás querían bailar pero cambiaron de parecer por ella, era un poco raro lo que sentía en ese momento, me sentía un poco mal al haberle dicho a Priscilla que me gustaba y que me gustaría estar con ella, habían pasado ya unos días y parecía que lo que le había dicho era mentira, pero lo que si sabía y muy bien era que la quería mucho, demasiado, de la manera que no había querido a alguien y menos tan rápido, no era costumbre, ni cariño; durante la película estuve sentado a su lado, las otras parejas estaban conversando y abrazándose pero nosotros solo mirábamos la pantalla.
Después de ver la película y no haberla abrazado siquiera, salimos; y al caminar se puso de otro lado, no estaba cerca mío y los demás estaban en parejas, me sentí más incómodo, por mí y por ella, algo me hizo pensar que era mejor así, que quizás no debí haberle dicho que me gustaba por Internet; no me merecía ser feliz aun, y menos con una chica tan linda como ella.
Estaba muy enamorado pero era un tonto al no saber qué hacer, muchas personas dicen cómo quieren que sea su pareja ideal, quizás yo también lo haya dicho en algún momento, pero me puse a pensar que cuando dices eso lo dices porque eso es un gusto, un deseo; en ese momento sabía que ella era mi chica ideal, por lo que yo veía, me interesó mucho su manera de ser, su estado de ánimo, su sentido del humor, no sé si otras personas veían a sus parejas así, pero sabía que me había enamorado y muy rápido.
Ese día se despidió sin decir nada y se fue sola, no me atreví a acompañarla ya que tenía que acompañar a Romina también, porque nos iríamos juntos, me sentía mal, triste, solo de nuevo sin nadie a quien querer (o mejor dicho a quién querer pero no sabiendo si alguien de verdad me quería), ese día la vi rara sin prestarme siquiera la menor atención, me sentí mal, no soy muy expresivo cuando digo que soy sensible, pero sí lo era, inclusive cuando se lo dije ella no lo creía del todo, no sabía si era cierto o no, lo único que sabía era que esa chica que miraba irse era una chica buena que merecía ser querida y yo también creía que merecía ser querido por alguien, pero me di cuenta que no todo era cierto.
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