Era setiembre y ya no podía aguantarme las ganas de decirle lo que sentía, nos mandábamos mensajes de texto muy seguido y las llamadas mejoraban cada vez más, parecíamos enamorados sin serlo, no sabía si le gustaba en realidad, o si sabía lo que yo sentía por ella, pero esos días eran realmente lindos.
Romina, Liz y Pris irían a una parrillada (un viernes si no me falla la memoria) estaban algo emocionadas por ir; yo no haría más que estar en casa haciendo mis cosas.
Esa tarde recibí un mensaje de ella, me decía que estaba mareada, y que se estaba cayendo, inclusive me llamó, Liz me bromeó diciendo que la recogiera porque estaba mal, Pris me decía en sus mensajes que se sentía bien cuando le decía cosas tiernas, que le incomodaba a veces pero que le gustaban, yo me mostré más abierto y le dije que sentía algo más que un simple afecto, a lo que ella respondió que también, algo abochornada, y me pidió que lo habláramos posteriormente, le di la razón y ese día la deje descansar.
Al día siguiente quería hablar con ella, para esto nosotros teníamos una labor social en un distrito algo lejano, compartimos el día con ancianos, la pasamos bien y después de eso le dije si podíamos hablar, ella se sintió incómoda y se rió como si estuviera avergonzada y me dijo que no podíamos hablar sobre eso en ese momento; yo no sabía que pensar, teníamos tiempo pero no quería hacerlo en ese instante, solo le dije que estaba bien , lo que a mí me importaba era saber si quería estar conmigo y sentía lo que me dijo el día anterior por mensajes de texto.
Ese día no conseguí hablar con ella, regresamos en un bus a la universidad, recuerdo que nuestra relación de algo más de amigos llegó a los profesores porque inclusive ellos nos molestaban, cuando bajamos del bus, ella se fue simplemente pero yo le pedí hablar el día siguiente porque teníamos que hacer un trabajo en casa de Romina, me dijo que sí que ahí estaba bien.
Cuando llegó el domingo fui a casa de Romina, ella estaba ahí, y cuando busqué un momento para estar solos, me dijo que no podíamos hablar, primero porque si nos demorábamos las demás se quejarían, y segundo porque habría traído su laptop, y no habían muchos carros para su casa, sería peligroso para ella. Inclusive nos fuimos en el mismo carro hasta mi casa, en los 5 minutos de trayecto no le pregunté nada, pensaba que la estaba forzando, si ella no quería hablar era porque quizás no sentía lo que dijo en sus mensajes, solo que no quería hacerme sentir mal. No sabía que pensar, solo quería despejar mis dudas.
Bajamos del micro para que tome otro carro, estuvimos sentados unos minutos pero no le dije nada, cuando pasó su carro me despedí y le dije hasta mañana. Caminando a casa me ponía a pensar si en verdad no sentía nada, pero era extraño y todo lo que pasaba entre nosotros se iba a quedar ahí, quería conversar con ella sí o sí, y sería el lunes.
El lunes después de clases ella estaba aburrida y yo puse videos en su laptop para verlos con su amiga mientras ella conversaba afuera, (estábamos terminando el semestre y teníamos tiempo de sobra) luego su amiga me entendió cuando le dije que por favor me deje solo con ella, para mi mala suerte atrás estaban una pareja de la clase, pero el chico me entendió y se fue; cuando estábamos viendo los videos, la abracé, y no sabía si decirle que la quería o esperar a ver que sucedía.
Esos momentos fueron de mucha tensión para mí, ya tenía la oportunidad para decirle que me gustaba, que la adoraba, y que estaba enamorado de ella; empecé recordándole los mensajes de texto, preguntándole por los días anteriores, cada vez nos acercábamos más y se dejaba abrazar, luego volteó su rostro hacia el mío y no pensé en besarla, sino en acariciar su rostro, nunca la había tenido tan cerca, deseaba que esté ahí por mucho tiempo; cuando ya empecé a acercarme más, conseguí besarla, me sentí muy cómodo y contento, estaba besando a la mujer que me encantaba, y la que me hacía recordar que soñaba, porque todos los sueños trataban sobre ella, no le pregunté si quería estar conmigo, lo hice después, inclusive me hizo una broma diciéndome que no estábamos todavía, ese momento fue demasiado hermoso.
Mientras mirábamos videos en su laptop me dijo que no sería bueno decirle nada a nadie, que sigamos como siempre, a mí me pareció algo extraño, pero ella no quería que nadie se entere, no quería que nos molesten, le dije que ya no lo harían porque lo que todos querían era que estemos juntos, por eso nos molestaban, pero no le discutí más en ese momento.
Fuera de clases habían unos compañeros que querían entrar, la clase estaba cerrada por dentro, nosotros estábamos en un lado viendo supuestamente películas, luego les abrí la puerta, Pris y yo nos despedimos disimulando que no éramos nada y recuerdo que ese día se me paso demasiado rápido.
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